¿El hombre de acero? El poder de la suavidad



Más de los libros que escribió Margaret Paul... bastante resumido y traducido por mí...

Cuando sabemos y sentimos que poseemos poder personal es cuando sabemos que estamos más allá de la debilidad, más allá de la violencia de cualquier tipo. Podemos darnos el lujo de ser "suaves" (tiernos, dulces, amorosos...blanditos) porque sabemos que no significa que seamos débiles. Podríamos decir que estar en este estado es un ideal, algo por lo que muchos nos esforzamos por alcanzar la mayor cantidad de tiempo posible. Lamentablemente, muchas otras personas, al leer la palabra suave, o escuchar a alguien referirse a dicha suavidad, piensan automáticamente en algo endeble, en una especie de tarado, en un nerd, es algo frágil. Claramente, hay mucha confusión entre suavidad y debilidad.

Desde el ego, hemos aprendido que suavidad y poder son mutuamente excluyentes, que suavidad es sinónimo de debilidad y dureza sinónimo de poder. Por lo tanto no podemos ser poderosos y tiernos, dulces, amorosos, al mismo tiempo. Es uno o el otro. Por otro lado, para dar y recibir amor, no nos queda otra opción que conectar con aquella suavidad... Al menos yo no vi amor que provenga de la dureza del ego.

Hablemos de la diferencia entre suavidad y debilidad. Somos débiles cuando somos pasivos, rindiéndonos ante otros, dejando que saquen ventaja de nosotros. A su vez, somos internamente débiles cuando tememos ser controlados por los demás y tapamos este miedo tratando entonces de controlarlos a ellos. Somos débiles cuando le damos poder a la aprobación y desaprobación de los otros. Nos debilitamos cada vez que al sentir miedo, dejamos que el miedo nos controle, ya sea enojándonos, criticando, culpando, o bien siendo pasivos, complacientes, o resistiéndonos.

Suave, entonces no significa débil, y tampoco implica sumisión.

Históricamente hemos amado a personas que han sido realmente suaves y poderosas, pero ellos se han encontrado en general con mucha oposición -personas como Gandhi, o Martin Luther King, o Jesús. Estas personas han encontrado dureza en respuesta a su suavidad e inocencia. El ego humano está determinado a destruir la suavidad, temiendo (secretamente) su poder; el ego teme cualquier cosa que atente a controlarnos. Entonces, ¿qué puede motivarnos a ser suaves? La respuesta es simple: la dureza no provoca alegría.

Si estás sacudiendo la cabeza y pensando: "no...yo no quiero que la gente arrase conmigo", entonces te cuento que tu ego te está seduciendo para que creas que ser DURO es la única manera efectiva de protegerte ante la dureza de otros. El ego quiere que creamos que si somos atacados, tenemos que contra atacar. Así es como se generan las guerras, y así es como nos exterminamos. Sabemos que el ego no va a dar el brazo a torcer tan fácilmente.

Resiliencia 

En ingenieria, resiliencia es la capacidad de memoria de un material para recuperarse de una deformación, producto de un esfuerzo externo. Por ejemplo, las baldosas o azulejos se colocan con una pequeña separación entre ellos de modo que tengan espacio para expandirse cuando la temperatura se eleva. Lo que ocurre es que cuando la temperatura baja, el material vuelve a contraerse y a ocupar su espacio original. Todo material que es capaz de esto, se dice que es resiliente. 

LO MISMO OCURRE CON LAS PERSONAS. Adivinen qué tipo de material es más resiliente... Claro, como era de esperar y en línea con lo que discutimos en este post, los materiales, aunque aparenten ser duros, pero  que tienen las capacidad de ser blandos y más elásticos son más resilientes que los materiales más rígidos y duros. Por ejemplo, el acero es muy resiliente, y a simple vista parece y ES súper firme, súper poderoso...pero expuesto al calor (metafóricamente podríamos pensarlo como el amor), es capaz de fundirse y cambiar de forma. Por el contrario, el diamante (y cualquier material con alto contenido de carbón) es poco resiliente, y si se lo golpea, se rompe, se quiebra.


El desafío reside en mantenernos internamente conectados con nuestra conciencia superior, con nuestra parte de los sentimientos, con nuestra fuente de dulzura, ternura, amor, para poder ganar PODER, sin necesidad de ser necesariamente duros -aunque lo aparentemos, sino de poder adaptarnos a cada momento... como el acero ;)

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